El Legado de Halley

Las lluvias de estrellas, también conocidas como lluvias de meteoros, son espectáculos celestiales impresionantes. Una de ellas, las Oriónidas, está alcanzando su punto máximo de actividad, ofreciendo una oportunidad única para observar meteoros.

Observando los restos del cometa Halley

Cuando un cometa cruza la órbita de la Tierra, deja tras de sí escombros que se convierten en meteoros al entrar en nuestra atmósfera. Las Oriónidas son producto de los restos del famoso cometa Halley. La Tierra cruza la órbita del cometa dos veces al año, creando también en mayo la lluvia de meteoros llamada Eta Acuáridas.

Aunque menos conocidas que las Perseidas de verano, las Oriónidas alcanzan su punto máximo en un momento ideal este año, con cielos despejados de la luminosidad lunar, ofreciendo condiciones óptimas para la observación. Si el clima lo permite, se espera ver entre 10 y 20 meteoros por hora.

Cómo observar las Oriónidas

Los meteoros parecen irradiar desde la constelación de Orión, de ahí su nombre. Sin embargo, la mejor manera de verlos es observar todo el cielo, preferiblemente lejos de la contaminación lumínica. Estos meteoros son conocidos por ser rápidos, viajando a más de 65 kilómetros por segundo, brillantes y persistentes.

  • Lugar: Busca un lugar oscuro, alejado de las luces de la ciudad.
  • Tiempo: Dale a tus ojos al menos 15 minutos para adaptarse a la oscuridad. Evita mirar pantallas de dispositivos móviles durante este tiempo.
  • Dirección: Aunque los meteoros parecen venir de Orión, mira hacia el cielo en general.