La primera astrofotografía tomada con cámaras daguerrotipo cumplió 180 años

La fotografía ha recorrido un largo camino para llegar a donde está actualmente. En casi 200 años, las primera cámara de daguerrotipo se desarrolló a partir de una caja con aspecto simple que tomaba fotografías borrosas y con una capacidad limitada. 

Con el avance de la tecnología han quedado atrás aquellos modelos analógicos de carrete que exigían una revelado lento. Hoy en día, las cámaras realizan una cantidad casi inimaginable de fotografías y permiten ver el resultado al momento. Además, las cámaras profesionales consiguen mayor nitidez y mejor representación del color de las imagénes.

La primera fotografía de un eclipse de sol fue tomada el 28 de julio de 1851 por un daguerrotipista llamado Berkowski.

180 años de la primera fotografía de la Luna

A lo largo de estos años, las cámaras han registrado eventos que marcaron el curso de la historia. El 23 de marzo de 1840, el profesor de química de la Universidad de Nueva York, médico e investigador científico, John William Draper, logró capturar la primera fotografía del satélite natural de la Tierra, concretamente la luna.

A día de hoy, podemos encontrar miles de imágenes en Internet sobre la Luna. No obstante, la mayoría de cibernautas desconocen sobre la técnica implementada hace 180 años, que tenía como propósito obtener una captura de la Luna.

La toma fotográfica fue posible gracias a una imagen de daguerrotipo, la cual fue inventada en 1839 por el francés Louis Daguerre. En esos tiempos, cuando alguien quería retratar una imagen debía esperar 20 minutos para visualizarla.

A pesar de este tipo de dificultades, el profesor de química ideó la forma de tomar imágenes de  los astros. En ese caso, utilizó un telescopio reflector de 13 pulgadas para proyectar la imagen de la luna sobre el material sensible. Dicha fotografía sorprendió a la población y dio la vuelta al mundo.

No obstante, este logro solo sería el inicio de otros acontecimientos que marcaron la historia. Cuando el académico entendió que es posible capturar la imagen a través de reacciones de distintos materiales químicos ante una placa sensible a la luz, decidió capturar otros daguerrotipos. En 1843, Draper capturó los espectros infrarrojos y ultravioletas provenientes del sol.

La fotografía de Henry Draper de 1880 de la Nebulosa de Orión, la primera que se tomó.

La técnica formulada y la implementación para plasmarlos llamó la curiosidad de muchos. Cada vez más investigadores experimentaron en la fotografía y tuvieron un progreso muy rápido. Con los años, las personas hicieron pruebas con diferentes químicos y técnicas para llegar al desarrollo de la fotografía moderna.

Gracias a la compresión del comportamiento de la luz, en materia astronómica, el hombre ha podido capturar múltiples imágenes de galaxias a años luz de distancia de la Tierra. Las cámaras actuales nos permiten ajustar los enfoques, de tal manera que podemos registrar mayor contenido audiovisual y de mejor calidad.

La mayoría de estos archivos han permitido que las agencias espaciales tengan una comprensión adecuada sobre el comportamiento natural de los astros en el universo, contribuyendo con el raciocinio (facultad de razonar y tomar decisiones) e intelecto humano.