El Premio Nobel de Química ha reconocido el desarrollo de las estructuras metal-orgánicas (MOF). Estos materiales innovadores tienen el potencial de revolucionar campos tan diversos como la purificación del aire y la captación de CO2.
¿Qué son las estructuras metal-orgánicas (MOF)?
Las estructuras metal-orgánicas, conocidas como MOF (metal-organic frameworks), son materiales porosos formados por iones o cúmulos metálicos coordinados con moléculas orgánicas. Su particular estructura genera cavidades internas que permiten el paso de otras sustancias químicas.
Según el jurado del Premio Nobel, los MOF permiten «recuperar agua del aire en el desierto, capturar dióxido de carbono, almacenar gases tóxicos o catalizar reacciones químicas». La clave está en la versatilidad de sus componentes, que permiten capturar y almacenar sustancias específicas.
Aplicaciones de los MOF
El desarrollo inicial de los MOF se remonta a 1989. Desde entonces, se han creado miles de MOF diferentes. Las aplicaciones son vastas:
- Captura de CO2: Los MOF pueden ayudar a mitigar el cambio climático.
- Purificación del aire: Eliminan compuestos orgánicos volátiles (COV).
- Sistemas de administración de fármacos: Debido a su porosidad controlada.
- Almacenamiento de energía: Mejoran la capacidad y eficiencia de baterías y supercondensadores.









