Aquellos que sufren de asma o fiebre del heno son casi el doble de propensos a desarrollar un trastorno mental que aquellos que no lo sufren.

Cerca del 11 por ciento de las personas alérgicas también desarrollan enfermedades mentales. Las personas que no tienen alergias tienen un 6.7 por ciento de probabilidades de desarrollar un trastorno mental. Los científicos taiwaneses concluyen que los alérgicos tienen 1,66 veces más probabilidades de padecer enfermedades mentales.

Los científicos utilizaron una base de datos de reclamos de seguros de salud en Taiwán. Esta base de datos contenía datos sobre más de 46.000 alérgicos y 140.000 personas sin alergia. Los datos procedían de personas de todas las edades y se recogieron durante un período de 15 años.

Los datos mostraron que las personas con fiebre del heno, asma o ambas, eran más propensas a desarrollar enfermedades mentales.

Las igniciones están relacionadas con trastornos mentales como la depresión y la ansiedad, según cada vez más investigaciones. Las alergias también son causadas por inflamación. Los científicos sugieren que las mismas inflamaciones pueden contribuir al desarrollo de enfermedades mentales. El estrés involucrado en un trastorno mental también puede contribuir a las quejas físicas como las alergias.

Los científicos están investigando la causa exacta de la relación entre las alergias y los trastornos mentales. También quieren llamar la atención de los médicos sobre sus resultados. Por ejemplo, los médicos pueden ser más capaces de controlar mejor a sus pacientes con alergias a la salud mental con el fin de reducir o incluso prevenir los problemas de salud mental.

Este estudio se entrega en Fronteras de la Psiquiatría